La urea es un tipo de fertilizante ampliamente utilizado en la agricultura y la jardinería. Se trata de un compuesto químico sólido, cristalino e incoloro, con una fórmula química de (NH₂)₂CO. La urea es una de las formas más comunes de nitrógeno utilizadas como fertilizante en el suelo, y es conocida por su alto contenido de nitrógeno.
El fertilizante de urea es muy soluble en agua, lo que facilita su aplicación y absorción por parte de las plantas. Cuando se aplica al suelo, la urea se descompone en amonio y dióxido de carbono debido a la actividad de las enzimas presentes en el suelo. El amonio resultante se convierte en nitrato, que es la forma de nitrógeno que las plantas pueden absorber y utilizar para su crecimiento y desarrollo.
Una de las principales ventajas de la urea como fertilizante es su alto contenido de nitrógeno. El nitrógeno es un nutriente esencial para las plantas, ya que promueve el crecimiento de las hojas y el desarrollo de un follaje denso y verde. Además, la urea tiene una tasa de liberación de nitrógeno relativamente lenta, lo que significa que proporciona nutrientes de manera constante a lo largo del tiempo, lo que favorece un crecimiento equilibrado y sostenido de las plantas.