Mitigación del estrés por baja luminosidad en frutales de exportación
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Por: I.A; MSc. Elías Alexander Silva Gerente técnico Disan Agro
¿Por qué la baja luminosidad es un problema crítico en frutales?
Estrés por baja luminosidad en frutales. En frutales de exportación como vid y manzano, la baja luminosidad — definida por niveles de radiación fotosintéticamente activa (PAR) menores a 400 µmol m⁻² s⁻¹ — representa una de las principales limitantes fisiológicas.
Esta condición reduce la asimilación de CO₂ y compromete la síntesis de azúcares y almidón, generando déficit de carbohidratos en yemas y raíces, lo cual afecta directamente el desarrollo y la producción de fruta (Taiz & Zeiger, 2022).
¿Cómo impacta la baja luminosidad en la fisiología de la planta?
Cuando los niveles de luz son bajos de forma prolongada, ocurren múltiples alteraciones fisiológicas:
Disminuye la fotosíntesis neta y la eficiencia fotoquímica del fotosistema II.
Se reduce la conductancia estomática.
Se altera la estructura interna de los cloroplastos, con laminillas desorganizadas y acumulación de plastoglobulos.
Se incrementa el estrés oxidativo, evidenciado por mayores niveles de MDA y prolina.
Disminuye la actividad de enzimas antioxidantes como SOD, POD y CAT.
Se reducen las proteínas solubles foliares.
Además, la planta entra en un estado de “shade avoidance”, en el que aumenta la producción de auxinas y giberelinas para buscar luz a costa de frenar la floración y afectar el cuaje (Ghorbel et al., 2023).
Relación entre la T6P y la floración
Un punto clave es la trehalosa-6-fosfato (T6P), una molécula señal que indica la disponibilidad de sacarosa y activa la floración. En condiciones de baja luz, la actividad de la enzima TPS1 disminuye, lo que limita la T6P, impidiendo la inducción floral aun cuando haya suficiente sacarosa disponible (Wahl et al., 2013).
Estrés por baja luminosidad en frutales: ¿cómo mitigarlo?
Una estrategia biotecnológica eficaz es el uso de extractos de algas pardas, especialmente de:
Ascophyllum nodosum
Macrocystis pyrifera
Sargassum spp.
Estos extractos ofrecen metabolitos activos como manitol, laminarina, fucoidanos y alginatos, que cumplen funciones clave:
Donación rápida de carbono.
Osmoprotección celular.
Activación de defensas antioxidantes.
¿Qué aporta cada alga parda?
🔹 Ascophyllum nodosum Contiene altos niveles de manitol y laminarina. Ideal para reponer carbohidratos y sostener la osmorregulación (Chades et al., 2018; Ummat et al., 2024).
🔹 Macrocystis pyrifera Rica en fucoidanos sulfatados de bajo peso molecular. Eficaz para activar enzimas antioxidantes como SOD y CAT y proteger tilacoides (Zou et al., 2021).
🔹 Sargassum spp. Aporta polifenoles y fucoxantina, pigmento que amplía la captación de luz y protege la eficiencia fotoquímica bajo sombra (Budhiyanti et al., 2012).
¿Por qué usar los tres extractos en combinación?
La combinación de estas algas permite aprovechar la sinergia entre sus metabolitos:
Los carbohidratos (manitol, laminarina) compensan la baja fotosíntesis con energía inmediata.
Los fucoidanos y alginatos fortalecen la estructura celular y el sistema antioxidante.
Los pigmentos como fucoxantina amplían la captación de luz disponible.
Gracias a esto, se corrige el desequilibrio hormonal, se modula el crecimiento vegetativo y se mejora la transición hacia la floración y cuaje, incluso bajo condiciones de sombreo.
Una solución práctica, natural y con respaldo científico
El manejo agronómico del estrés por baja luminosidad en frutales puede complementarse con herramientas bioestimulantes seguras, sostenibles y de eficacia probada. En ese contexto, los extractos de algas ofrecen una alternativa viable frente a los efectos negativos del sombreo prolongado, permitiendo sostener la fisiología y mejorar el rendimiento.
SPRINTALGA®: bioestimulación con extractos de alga concentrados
SPRINTALGA contiene extractos altamente concentrados de Macrocystis, Ascophyllum y Sargassum, enriquecidos con aminoácidos, betainas, ácido algínico, micronutrientes y reguladores naturales del crecimiento.
Activa la luz dentro de la planta, incluso cuando el cielo no acompaña.